Sólo hay que ver el vídeo. Sólo eso. No hace falta nada más para que se te ponga un nudo en la garganta cuando se oye en mensaje del hijo en el avión..., al pasar por arco de bomberos en Barajas..., los movimientos de la boca del Comandante aguantando las lagrimas en los últimos metro de rodaje hasta el parking..., ese ultimo momento en el que vuelve a sentarse en su asiento del 330 por ultima vez y abre la ventana lanzando un beso...
We are back. Si, ahora somos We. Se une a nosotros como autor del blog mi compañero de vuelos, mi instructor, el que me ha enseñado Navegación... Jose Martin Artacho. Piloto...de los buenos.
Despues de esta breve introducción/mensaje de nueva bienvenida, hoy quería compartir aquí un video que me ha llegado esta mañana y que me ha puesto los pelos de punta.
Un video de esos, que al verlos, vuelves a creer, no sólo en que la aviación es más que los aviones y los pilotos, sino que vuelves a creer en que esas multinacionales que son las compañias aereas, a veces, tienen corazón y no solo miran para ellos, sino que les importan de verdad los pasajeros. Un video que demuestra que en Navidad todo el posible (incluso que un vuelo de Spanair llegue en hora), que es posible que la ilusión viaje a bordo de un 320, que la imaginación fluya, y que aunque a veces cueste, hoy uno se alegra de ser parte de ese mundo, tan grande y tan pequeño a la vez, que es la aviación.
Un 10 para Spanair. Hoy, (sin que sirva de precendente), más que nunca,....La de todos.
